¡ohlala!

No me salen las palabras..., 

me he encontrado un sitio por casualidad lleno de escombros y muebles viejos... , y mis ojos no podian dejar de mirar y mirar y mis piernas de andar y andar, y mis manos de recoger y recoger. He conseguido 5 sillas que habrá que restaurar (dos parejas y una distintas), pero que estan libres de carcoma, ¡que suerte la mia!, dos cajones de algún mueble que he pensado que los utilizaré como estantes, dos cestas grandes de mimbre, de esas donde los caballos transportaban utensilios antiguamente, y que yo ya las tengo llenas de mis plantitas, utilizándolas como maceteros, si es que estoy alucinando. Una joya incríble, es una antigua funda de esas duras y negras para guardar instrumentos, concretamente una trompa, que no tengo ni idea donde la pondré pero no he podido resistirme.

No tenía espacio en el coche y tengo que volver a la hora de comer a por una ventana, que al parecer sería de algún derribo, que ya tengo pensado donde la colgaré, una butaca vintage, una meceta de barro en perfectas condiciones, y una especie de carro de madera de una única rueda, al que le falta la rueda y que lo destinaré como macetero en el jardín.

¡No puedo creérmelo!

 mis nuevas viejas sillas

 curiosos maceteros

el butacón

Al final la ventana no ha podido ser, cuando he intentado subirla al coche, se me ha desmontado toda, al parecer se habia podrido la madera, pero era preciosa.